Quedamos en el Puerto de Badalona hacia las 10 h. De la mañana para tomar un café y ultimar las compras. Estibamos nuestras cosas y la comida en el velero y salimos a navegar hacia las 12 h. Aquí empieza nuestra travesía de altura en la que a lo largo de las próximas horas nos permitirá hacer las 150 millas que separan nuestro puerto del de San Antoni, donde prevemos llegar pasadas unas veinticuatro horas aproximadamente o lo que es lo mismo, a la hora de comer del día siguiente.
Organizamos la travesía en guardias de dos personas por guardia. El patrón da las indicaciones necesarias para que todos por parejas podamos quedarnos en el control del barco y nos vamos turnando cada dos horas. Lógicamente tenemos el patrón a nuestra disposición para cualquier duda o para lo que sea necesario.
Llegada al Puerto de Sant Antoni hacia la hora de comer. Atracamos, vamos a tomar unas merecidas duchas y salimos a dar una vuelta por la ciudad. La Bahía de Sant Antoni fue rebautizada por los romanos como ‘Portus Magnus’, lo que da una idea de la impresión que les hizo el lugar cuando pisaron por primera vez este municipio, que posee el puerto natural más grande de Ibiza. La zona mas concurrida es la del Passeg de ses Fonts, donde encontraremos una variada oferta de bares, restaurantes y tiendas. Por las noches, la fuente central es el escenario de un refrescante espectáculo de luz y sonido. Esa misma noche podemos organizar una cena en el velero o bien ir a cenar fuera.
Después del desayuno salimos a navegar hacia el sur de la isla. Pasaremos por Ça Conillera y por la Isla d’en Bosc dirección Cala Jondal que según dicen, la prefieren ahora los famosos que antes se veía por las Salinas. Y hablando de ellos y de los lugares que frecuentan, uno de los restaurantes de playa más famosos de la isla es el Blue Marlin, pero en general nosotros preferimos tomar algo en algun chiringuito.
Quizás prefiramos un poco más de tranquilidad escojamos alguna de las calas bajo los acantilados de Es Cubells. Hay varias calas de pescadores preciosas, como ses Boques, Cala Llentrisca, Es Torrent o Porroig. El pueblo, además, es un buen punto de partida para visitar el Parque Natural de Cala d’Hort, donde podemos parar a hacer un fondeo, bañarnos y comer un poco. Por la tarde continuamos haciendo la vuelta a la Isla por su parte Sur hasta llegar a Cala Saona.. Esta cala, que pertenece ya a Formentera y que es la más grande de la isla nos ofrece un buen receso para hacer el fondeo y pasar la noche.
Nos levantamos en este entorno magnífico de Cala Saona para desayunar y hacer el primer baño del día. Hacia media mañana, cuando levante el viento, viraremos de rumbo para cruzar Es Freus no sin antes darnos un buen baño en s’Espalmador y comer algo tranquilamente para izar velas de nuevo por la tarde y dirigirnos a Cala Llonga.
Después de hacer un buen desayuno y quizá un buen baño matinal dejamos el lugar para ir rumbo noreste hasta fondear frente a la isla de Tagomago, donde entraremos para hacer nuestro buen baño y disfrutar de estas calas del noreste de la isla.
Hacia el atardecer entraremos en Cala Portinax, una de las más hermosas calas de esta vertiente norte. Deberemos tener en cuenta la prácticamente nula protección que nos ofrece el lugar para vientos del norte, que de soplar nos aconsejaran entrar en el Puerto de Santa Eulalia.
Sea como sea, el jueves al mediodía dejaremos la costa norte de Ibiza para iniciar nuestra travesía de vuelta a casa. Otra vez organizaremos las guardias, pondremos música, nos explicaremos historias o simplemente escucharemos el rumor del mar deslizarse bajo nuestro Triana V e iremos haciendo millas rumbo hacia el norte.
Por la mañana navegaremos rumbo norte hasta, hacia medio día, ver la costa catalana por nuestro costado de babor. Seguiremos navegando para llegar aproximadamente hacia las 18 h. al Puerto de la Badalona donde, tras una merecida cervecita todos juntos nos despediremos hasta la próxima.
